¿Quién eres? ¿de dónde saliste? lo ideal hubiera sido que aparecieras antes pero ahora tampoco me vienes mal.
Quita las manos de tu cintura que no vamos a pelearnos, ponlas en la mía que quiere conocerte. Te dejo que mandes pero al final y ahí sabes que mando yo.
Así, sin argumento, llegas y apuntas directo. Espero que no te importe el desorden, ya sabes, es lo que deja el alquiler aunque espero que tú vengas con contrato de compra. Yo a cambio prometo algunas cosas pero prefiero ir contándotelas poco a poco, bajito y al oído.
No hay comentarios:
Publicar un comentario